Primos
Primos de la casa, y se les nota que están deseando ser los primeros en probar la pola del jefe. Elos no se lo piensan, y se ponen manos a la obra para satisfacer a sus putitas, una de las cuales se tira en el sofá, y la otra que está a cuatro patas, se le sube sobre sus caderas, y se pone a cabalgar sobre su rabo. Las chicas son unas verdaderas guaras, y se dejan hacer todo lo que les piden, siempre con la misma condición de que tengan que chuparle la pola.