Relatos eroticos de infidelidades
Relatos eroticos de infidelidades entre hermanos El mejor vicio que hubiera sentido la madre por su hijo no se habría alcanzado con sus caricias y besos. Pero la golfa de su madre también es una ninfómana insaciable, así que cuando le escribe a su hermano para decirle que ya está la cama preparada para dormir, la muy puta aprovecha el buen tiempo para toquetearse en el jardín mientras el chaval duerme la siesta para comerle la pola. Después de eso la fola al aire libre mientras ela se masturba como una guara y termina coriéndose en la boca de su hermanita.